Si enamorarse ya es complicado, cuando te sucede con un hombre casado, la cosa toma otro nivel… el nivel del dilema ético.
Y es que esa persona ya le prometió a otra pasar el resto de su vida juntos.
Lo sabes, ¿cierto?
Salir con un hombre casado conlleva múltiples desafíos y sobre todo frustraciones, ya que nunca te imaginaste que te sucedería… pero sucedió.
Y cuando el corazón quiere lo que quiere, se le da lo que pide… así que si estás segura del paso que quieres dar, estos trucos para enamorar a un hombre casado te podrán ayudar.
Activa su “instinto de héroe”
Enamorarte y fantasear con un hombre que ya está casado es fácil, porque ya puedes ver qué tipo de esposo es.
Eso puede llegar a ser sexy para ti, pero el problema es que no está contigo.
Y si quieres cambiar eso, necesitas escuchar o leer sobre la teoría del “instinto de héroe” y aplicarla con él.
Según el instinto de héroe, los hombres tienen un impulso biológico de mantener y proteger a las mujeres, y un hombre puede llegar a perder el interés en su matrimonio, si este instinto no se activa.
Y ahí entras tú para activarlo de varias maneras:
- Pídele ayuda.
- Celebra sus éxitos.
- Sé genuina
- Respétalo.
- Permite que te haga feliz
- Apoya sus pasiones e intereses
- Muéstrale que es el único
- Desafíalo
Conviértete en su confidente
Ocurre con mucha frecuencia que la persona con la que un hombre casado tiene una aventura o relación extramarital, es alguien que se ha convertido en su confidente durante o antes de su matrimonio.
Es posible que al ver en ti a esa persona que ya sabe todo los ires y venires en su matrimonio, sienta la confianza y la compenetración suficiente para atreverse a dar ese paso tan arriesgado contigo.
No seas tan obvia
Ser agresivamente atrevida con tus intenciones podría funcionar con un soltero o un playboy, pero no con un hombre comprometido.
Si eres demasiado obvia, inmediatamente huirá de ti.
Así que, tómalo con calma, y entra lentamente en su vida, en su mente, y en su corazón.
Empieza como una amiga y deja que evolucione lentamente, hasta que te conviertas en esa confidente en la que puede confiar fuera de casa.
Que no solamente te vea como esa persona con la que podría tener un flirteo fuera del matrimonio, sino en alguien con quien que podría estar, gracias a otras cualidades y razones.
Arréglate y luce físicamente irresistible
Ya que lo estás conociendo bastante, intenta convertirte en esa mujer que a él le gustaría ver en su esposa.
Muéstrale lo atractiva que puede llegar a ser una mujer, y haz que extrañe eso.
Como sabes, los hombres son más visuales que las mujeres, y seguramente notará tus esfuerzos físicos, especialmente si se ven con regularidad.
Hazle saber que no eres suya
Haz que se sienta celoso y te anhele.
Hazle saber que podría perder tu interés y atracción, si no actúa de manera proactiva contigo.
Demuéstrale que no eres suya tal y como su esposa sí lo es, y que a pesar de tu coqueteo, siempre existe la posibilidad de que te pierda, en el preciso momento en el que otro hombre te ofrezca lo que él no se siente capaz de dar.
Esto lo pondrá nervioso, y en lugar de preguntarse si debe dar un paso adelante, comenzará a plantearse cuándo dar ese paso.
No menciones a su familia
No menciones a su familia en las conversaciones, a menos que él lo haga.
Muéstrale que a tus ojos él no es papá, esposo o padre de familia.
Él es él: sus intereses, sus pasiones, sus pasatiempos, su carrera, su humor y su personalidad.
Es todo lo que era antes de que su esposa entrara en escena.
Esto es una táctica fantástica, ya que, además de ti, se estará enamorando también de la posibilidad de volver a ser lo que era antes de comprometerse.
Aprécialo y Emociónalo
Satisface su necesidad de sentirse apreciado y emocionado.
No dudes en halagar su apariencia, aunque sin exagerar; dile que te parece interesante y que sus ocurrencias te resultan muy divertidas.
Muéstrale que lo ves de una manera en la que quizá su esposa ya no lo ve.
Se trata de que se enamore de ti, haciéndolo enamorarse de sí mismo nuevamente.
Si le haces sentir esa sensación en cada encuentro, más querrá verte.
Incluso, siempre que tengas oportunidad, intenta sacarlo de su rutina; así le muestras que la vida no ha terminado y que todavía puede experimentar cosas nuevas.